Posee las aguas más profundas y transparentes de toda la costa tropical, de ahí el nombre de Calahonda. Los acantilados cercanos son ricos en aves acuáticas y en plantas rupícolas, muchas de ellas conectadas genéticamente con las del norte de África. Uno de los mejores lugares para observar estos ecosistemas es el conjunto de acantilados de Calahonda.

 Sus playas son de arena gruesa y con piedras, extendiéndose desde el cabo Sacratif hasta Calahonda con aproxidamente 5Km de recorrido y unos 40 metros de anchura, siendo de aguas claras, azules y limpias. Están bien equipadas y cuentan con la Certificación Q de calidad Turística, marca de calidad que cumple con una serie de características aportando prestigio, diferenciación, fiabilidad y rigor a las playas certificadas.

Esta imagen de calidad turística española, es reconocida a nivel nacional e internacional. Junto con esta certificación, cuenta también con la Bandera Azul y Certificación de playas Cardioprotegidas, con grandes contrastes, donde se puede bucear y pescar, y debido a la amplitud de sus playas sin una aglomerada construcción, permite practicar diferentes deportes acuáticos, como la vela, el surf, etc.….

La práctica de estas actividades se prolonga durante todo el año. Aquí no existe el obligado parón invernal de la mayoría de otros destinos de buceo. Esto es principalmente por la temperatura media del agua en torno a 22º en verano y unos 17º en invierno, dependiendo mucho de los vientos y de las corrientes.